domingo, 27 de noviembre de 2011

MERCADO DE ESCLAVOS DE JEAN- LÉON GÉROME

MERCADO DE ESCLAVOS 1866
Mercado de esclavos de Jean Léon Gerome
óleo sobre lienzo 84,6 x 63,3 cm
Colección Sterling Clark








Mercado de esclavos es uno de los cuadros más provocadores de Gérome .El centro de la escena está ocupado por una mujer desnuda puesta en venta como esclava y rodeada por un grupo de hombres . El potencial comprador le sostiene la cabeza con una mano y con la otra

le examina los dientes, como generalmente se hace con los caballos . A la derecha vemos alvendedor, evidentemente complacido por la inminente transacción .

Aunque más bien indeterminado , el ambiente evoca un mercado montado en un patio delOriente Próximo y el artista parece sugerirnos que es Egipto. La técnica meticulosa de Gérome y el cudadoso detalle de los indumentos de la arquitectura son tan realistas que en el Salonde 1867 un crítico observó : " Mercado de esclavos es una escena de la vida real ".

Más allá de este comentario , es improbable que el artista asistiera a un episodio de este tipo en sus viajes por el Norte de África ; aunque existía la esclavitud , no hay noticias de que hubiera mercados al aire libre como el que está representado aquí.Vale la pena recordar que el pintor había ambientado escenas similares en la antigua Roma.

Parece que en Mercado de esclavos trata de medirse con la tradición de representar las culturas del Oriente Próximo y del Norte de África como algo exótico, misterioso e incluso bárbaro . El potencial erótico de una mujer desnuda a figura entera en medio de un grupo de hombres completamente vestidos - el esclavo africano desnudo está medio oculto al fondo, en la parte derecha-seguramente no pasó desapercibido ni a él ni a sus clientes. Quizás el cuestionable mensaje de la pintura fue interpretado mejor que nadie por el caricaturista Chaim, que parodió la composición titulándola : " Árabe con dolor de dientes que compra una esclava para que mastique la cena por él ".

Ambientando la escena en un sitio obviamente exótico , Gérome permitía al público europea interactuar libremente con la pintura sin sentirse cómplice de la acción representada.Este distanciamiento daba al observador también la posibilidad de censurar la práctica del comercio de esclavos, manteniendo inalterado el placer derivado de la idea de tener acceso completo-físico y psíquico al cuerpo femenino El refinado academicismo de Gérome se utiliza con inteligencia para describir la pasividad del desnudo de mujer en nitido contraste con las figuras de los hombres vestidos. A pesar del naturalismo y la aparente objetividad Mercado de esclavos no es de ningún modo una imagen neutra y está impregnada de estereotipos raciales y sexuales sumamente molestos para un público moderno.

Mercedes Tamara 
27 noviembre 2011



Bibliografía ; Colección Sterling Clark, Caixa Forum


jueves, 24 de noviembre de 2011

EL DESCANSO DE WATTEAU

EL DESCANSO 1709

EL descanso
óleo sobre lienzo 32 x 42,5 cm
Museo Thyssen Bornemisza Madrid



Entre los temas que Jean-Antoine Watteau trató en su carrera, además de las fiestas galantes, se encuentran las escenas ambientadas en el mundo militar. El interés de Watteau por la vida de los soldados se sitúa al inicio de su actividad profesional y fueron precisamente dos pinturas con este asunto las que consiguió vender a su primer marchante.




En ese periodo, Luis XIV estaba en campaña en el norte del país y Valenciennes era una de las ciudades afectadas por el conflicto. En la contienda, el duque de Marlborough había obtenido las victorias en las batallas de Oudenarde en julio de 1708 y de Malplaquet en septiembre de 1709, y había derrotado al mariscal francés Villars. Este ambiente fue el que Watteau encontró al regresar a su ciudad natal y que, a juzgar por los ejemplos que conocemos, sirvió de aliciente artístico al joven pintor, que tuvo ocasión de tomar apuntes del natural para elaborar con ellos nuevas composiciones. Sin embargo, en estas escenas Watteau no está interesado en mostrar aspectos directos de la lucha o de la confrontación, sino el día a día de las milicias fuera del campo de batalla. Así, entre los temas por los que se interesó se encuentran los desfiles, las acampadas, las marchas y los momentos de descanso o de ocio; es decir, la vida del soldado fuera del combate.


Esta tela, que fue proyectada en formato oval, perteneció a uno de los biógrafos de Watteau, Jean de Jullienne, en cuya colección estaba en 1729. De allí pasó a ser propiedad del príncipe Conti, también en París, y tras su venta en 1787 el lienzo apareció en Gran Bretaña. En el Reino Unido se registró entre los bienes del conde de Egremont y de lord Leconfield; años más tarde está en Estados Unidos, en la casa Duveen. La pintura finalmente fue adquirida para la colección Thyssen-Bornemisza en 1975. La tela estuvo emparejada con otra titulada El desfile, obra desaparecida que se conoce por grabados.

El descanso recoge en esencia el espíritu que Watteau inculcó a estas sencillas composiciones. El ambiente militar queda relegado a los últimos términos, a la derecha, con las carretas para el avituallamiento y un gran puchero al fuego. Los soldados descansan en torno a dos grandes árboles que dividen el espacio y se colocan en pequeños grupos con los que se articulan los primeros planos. Es aquí donde el artista ha instalado, en medio de un campamento provisional, a dos damas, ricamente ataviadas, una de las cuales, en un gesto de coquetería, se sube con discreción las ropas para no ensuciarse el bajo de su traje con el barro. Las mujeres, distantes a lo que sucede a su alrededor, parece que entablan conversación bajo la mirada curiosa de una pareja de soldados, uno de ellos herido en la cabeza y en el brazo. Watteau también añade otras dos figuras más, ajenas al mundo militar: una joven madre y su hijo, que también aprovechan el entorno arbolado para hacer un alto y descansar.

Como es habitual en la obra de Watteau, se conocen varios dibujos en conexión con los personajes de este descanso. Entre ellos citamos el del Musée Carnavalet de París, que sirvió para elaborar la dama vestida de amarillo, y el del Nationalmuseum de Estocolmo, que reproduce a la mujer joven en el centro.


A la derecha, con las carretas para el avituallamiento y un gran puchero al fuego. Los soldados descansan en torno a dos grandes árboles que dividen el espacio y se colocan en pequeños grupos con los que se articulan los primeros planos. Es aquí donde el artista ha instalado, en medio de un campamento provisional, a dos damas, ricamente ataviadas, una de las cuales, en un gesto de coquetería, se sube con discreción las ropas para no ensuciarse el bajo de su traje con el barro.

Mercedes Tamara
24 noviembre 2011


Bibliografía : El Rococó, Edic Taschen
                     Colección Del Museo Carmen Thyssen Bornemizsa , Madrid

                   

viernes, 18 de noviembre de 2011

TORRE DE BABEL DE PIETER BRUEGEL, EL VIEJO


TORRE DE BABEL 1563


Torre de Babel
óleo sobre tabla 114 x 155 cm
Museo Kunsthistoriches Berlin




La torre de Babel es una pintura de Pieter Brueghel el Viejo,actualmente localizada en el Museo de Historia del Arte de Viena, el Kunsthistorisches, en Viena, Austria



.
Su tema es la construcción de la torre de Babel que, según la Biblia,fue una torre construida por la Humanidad para alcanzar el cielo. Según el Génesis, Yahvé confundió la lengua de los hombres, lo que les llevó a dejar la torre inacabada y a que se marcharan en todas las direcciones.

Es un tema que ya había sido tratado con anterioridad, desde los libros iluminados del siglo VI. Se retoma en el siglo XVI como símbolodel orgullo humano ]advirtiendo de sus peligros, así como del fracaso de la racionalidad clásica frente a lo divino.

Es así una alegoría del orgulloso imperio internacional de los Habsburgo basado sobre una fe unificada y del estado constituido por banqueros ministros, clérigos, soldados y pensadores humanistas sicofantes
sometidos a tal proyecto.

El centro del cuadro lo domina la torre a medio construir, dentro de un amplio paisaje panorámico. El pintor adopta un punto de vista muy alto. En la parte superior de la torre, la presencia de una nube simboliza la pretensión de que querían alcanzar con ella el cielo.

La descripción de la arquitectura de la torre por Brueghel, con sus numerosos arcos y otros ejemplos de ingeniería romana hacen pensar de manera deliberada en el Coliseo que representaba para los cristianos de la época el símbolo de la desmesura y de la persecución.

De la Arquitectura de la Antigua Roma parece también provenir la mampostería de ladrillo, recubierta en el exterior por muros de sillería Es interesante constatar que la pintura de Brueghel parece atribuir el fracaso de la construcción a problemas de ingeniería estructural más que a diferencias lingüísticas de origen divino. Aunque a primera vista la torre parece constituida por una serie establece de cilindros concéntricos, un examen más atento demuestra la evidencia que algún piso no reposa sobre una verdadera horizontal; la torre está más bien construida como una espiral ascendente. Los arcos son sin embargo construidos perpendicularmente al suelo inclinado, lo que los hace inestables, algunos ya se aplastaron. Más inquietante puede ser el hecho de que los cimientos y los pisos inferiores de la torre aún no está acabados mientras que las capas superiores ya están construidas.

Tal vez lo grandioso de esa ruina inspiró a Brueghel lo sublime y al mismo tiempo lo vano o efímero del esfuerzo humano. Así es como generalmente se interpreta esta imagen: la Torre de Babel, monumentoa la vanidad del hombre y su inconsecuencia, pero al mismo tiempo tan magnífica... En el interior de la torre pueden catalogarse todo tipo de actividades humanas, todas contribuyendo a la elevación de la torre


Mercedes Tamara 
18 noviembre 2011


Bibliografía ; 1001 Pinturas que hay que ver antes de morirse, Edic Grijalbo



viernes, 11 de noviembre de 2011

LIRIOS Y ROSA DE ANTONIO LÓPEZ

LIRIOS Y ROSA 1977-1980
Lirios y rosas
óleo sobre lienzo 66 x 66 cm
Colección particular





Aunque la obra de Antonio López es fiel a unas ideas,a unas intenciones , a una manera de entender la representación , existen pequeños pero significativos cambios a lo largo de los años. Uno afecta a la relación que mantiene con la naturaleza.




Cuando en los años 50 y 60 quiere atrapar los efectos de la luz sobre una parra (La parra 1955 ) o un membrillero (Membrillero 1966) recurre a la pintura,al color , en un claro esfuerzo por perseguir la imagen hasta definirla.


Se encuentra con la dificultad añadida de la propia evolución , de los cambios, de la vida del motivo, lo que le obliga a corregir cada modificación , con lo que se alarga el proceso del trabajo . Para mantener la unidad de la imagen a pesar de las variaciones , utiliza recursos pictóricos , pero es consciente de las dificultades que implica.


Lirios y rosa es el último cuadro en el que se empeña en seguir la evolución de lo retratado y cerrar definitivamente la imagen, lo que le obliga a trabajar en él durante varios años , pendiente siempre de que la estación y la luz sean análogas a las de la primera sesión.


Desde entonces, decide ser menos rígido , sin restar intensidad a su relación con la naturaleza: ajusta el tiempo de trabajo de la vida y crecimiento del motivo. Dicho de otro modo: si quiere pintar una flor que tiene su plenitud en uno o dos días , trabaja su representación durante ese tiempo. 

Elegir bien el motivo y la medida adquiere una importancia decisiva , porque en donde
se hace realmente visible el cambio es en su voluntad de dejar la obra tal como se encuentra en el momento en que perdió el motivo. Lo señala el pintor de forma gráfica : " En este momento mi lenguaje es el mismo que el que utilizaba a finales de los años 50 . A partir de Lirios y rosa , las cosas cambían: es la última ocasión en la que acumulo varias pinturas para realizar un cuadro.

Mercedes Tamara 
11 noviembre 2011

Bibliografía : Antonio López, Edit Biblioteca El MUNDO

RETRATO DE LA PRINCESA OLGA ORLOVA DE VALENTIN ALAEXANDROVICH SEROV

RETRATO DE LA PRINCESA OLGA ORLOVA 1911

Retrato de la princesa
Olga Orlova

oleo sobre lienzo 
Museo del Ermitage , San Petesburgo


Valentín Aleksándrovich Seróv, en ruso: Валенти́н Алекса́ндрович Серо́в (19 de enero de 1865 - 5 de diciembre de 1911) Nació en San Petersburgo, hijo del compositor ruso Aleksandr Serov y su mujer Valentina Bergman, compositora de raíces germano-judías e inglesas. Durante su infancia estudió en París y Moscú con Iliá Repin y en la Academia Imperial de las Artes de San Petersburgo (1880-1885) con Pável Chistiakov. La temprana creatividad de Seróv fue oscurecida por el realismo artístico de Repin y el estricto sistema pedagógico de Chistiakóv. Las siguientes influencias que Seróv recibiría fueron de las obras de los antiguos maestros que vio en los museos de Rusia y Europa del Este, las amistades con Mijaíl Vrúbel y (más tarde) con Konstantín Korovin y la creativa atmósfera de la Colonia de Abrámtsevo, a la cual estaba muy unido.

Primeras obras. Las mejores obras de Seróv en su primer periodo fueron retratos: "Niña con Melocotones" (1887), y "La Muchacha Iluminada por el Sol" (1888), ambas en la galería Tretyakov. En estas pinturas Serov se concentra en la espontánea percepción del modelo y la naturaleza. En el desarrollo de la luz y el color, la compleja armonía de los reflejos, el sentido de la saturación de la atmósfera, y la fresca y pintoresca percepción del mundo, son características del impresionismo ruso.

El retrato de Orlova ( 1911 ) requirió más de cien sesiones .Esposa de un cortesano influyente,
la princesa Orlova ,era conocida como la mujer más elegante de San Petesburgo . De ahí el importante papel que se concede en el retrato al vestido y en especial al enorme sombrero negro . Sin dejar de ofrecer la vida interior de la modelo , el pintor subraya exhaustivamente su porte refinado , altivez , frialdad y amaneramiento en la pose y el gesto. Un matiz grotesco y cierta simplificación han ayudado a Serov a crear una imagen de intensa expresividad . 



A ello asimismo contribuye el fondo guarnecido con muebles de estilo , la sala adornada de obras de arte en la mansión de los Orlov El Retrato de la princesa Olga Orlova constituye un logro capital en la obra de Serov . El profundo psicologismo se conjuga en la obra con elcarácter triunfalmente representativo de la pintura retratística del siglo XVIII , con una  convencionalidad decorativa e intensidad emocional


Mercedes Tamara 
11 noviembre 2011


Bibliografía : Pinturas de los Grandes Museos , Edit Planeta

jueves, 10 de noviembre de 2011

LA PRIMAVERA DE VIKTOR BORISOV-MUSÁTOV

LA PRIMAVERA  1901



La Primavera
óleo sobre lienzo 81x72 cm
Museo Ruso




Victor Musatov nació en, 1870 in Saratov, Rusia.A consecuencia de una caída en su niñez se quedochepudo para el resto de su vida. Con tacto, sus padres lo condujeron hacia el mundo del arte, ylas clases del pintor Konovalov contribuyeron mucho a su formacion artística y personalidad.


En 1890 Musatov abandonó su ciudad natal para ir a la escuela de Pintura, escultura y arquitectura de Moscu. Insatisfecho con el sistema de enseñanza, se fue a San Petersburgo un año mas tarde esperando encontrar una preparación mejor en la Academia de Bellas Artes. Pero el sistema conservador tampoco le gustó y solo encontró un buen profesor en una escuela privada en Tchistyakov. El clima húmedo de San Petersburgo empeoró su ya mala salud y tuvo que volver a Moscu en 1893  ,donde retomó sus estudios en la escuela de Arte de la capital





En 1895 Musatov abandonó la escuela de Moscú y se fue a Paris donde trabajó durante tres inviernos, perfeccionando su dibujo en la escuela de Fernand Cormon, un pintor mediocre de temas históricos pero que  era un excelente profesor. El contacto con la pintura contemporánea francesa tuvo un efecto decisivo en su vida y trabajo- En 1898 Musatov finalmente volvió a Rusia. Casi inmediatamente después de su regreso Musatov tuvo una depresion. Encontró una salida, al menos creando un mundo espiritual, medio inventado, medio real.





 En esta época pintó Primavera ( 1901 ) la casa rosa iluminada por los rayos del sol, las flores rosa pálido de los cerezos , las mullidas cabecillas de los dientes de león en una hierba crecida crean una sensación de silencio y paz, ambiente que también invade a la mujer que pasea por el jardín. La sonoridad lírica de la figura se ve sostenida por una pálida gama de tonos delicados. Con posterioridad en los cuadros de Borisov-Musatov se intensificarán los rasgos de talante simbolista que, de manera alegórica , transmiten sus  vivencias anímicas y, se confirmará como dominante el principio elegíaco de profunda tristeza.




Mercedes Tamara 
14-08-2016



Bibliografía : " Pinturas de los Grandes Museos " Edit Planeta